viernes, 29 de marzo de 2013


Compras inusuales

Comprar un libro debe tomar su tiempo; se me parece en la manera en que entras a una tienda de ropa o de abarrotes. Primero te acercas con cautela, observas por todos sus lados, arriba, abajo, izquierda, derecha, revisas con sospecha la portada, cubierta, lomo, solapa, tomas menos de un minuto para leer las anotaciones de fábrica: hecho en, su historia personal, talla, personajes; con lentitud descubres sus páginas, empiezas a olerlo, criticarlo (sin saber si aciertas), te corrompen las páginas o te atolondran, te lo pruebas, durante segundos piensas si te lo vas a poner o no, si tienes más de esos en el armario o la alacena, si lo llevarás durante las tardes o en las mañanas de lluvia envuelto en bolsa plástica de  líneas verticales blancas trasparentes y azul celeste, en los buses, en la oficina, con frío o calor, en fin. Al final de esa pesquisa el mundo te despierta del trance de cinco o siete minutos, miras el precio, y recapitulas si los billetes estrujados que llevas en el bolsillo te alcanzan para dos hojas o todo el libro, si no, te das media vuelta e inicias el proceso o esperas a otro día. 

martes, 28 de diciembre de 2010

Torción

Es más fácil decir tontadas,
es más fácil renunciar a la fornicación
y al implacable vicio del alcohol y el cigarrillo,
que olvidar cómo usted en su éxodo
torció mi columna hasta el punto de sacar el tuétano
de mis huesos.

jueves, 29 de julio de 2010

No sé si se puedan contar las horas desesperadas,
si los muertos puedan levantarse a las calles.
La tierra negra silenciosa arma mortajas;
escuetas fruslerías son todas estas cosas.
Temo, escondo, corro y callo,
que mal todo esto, mi poesía ya no pinta,
ni las palabras tienen pasajeros
a quien hablar.

lunes, 5 de julio de 2010

Calles

He sentido la ciudad,
Ha estado fría, lenta, a ratos pálida,
incluso sórdida.
Me mezclo entre el aire
confuso de los buses atestados de gente,
y veo afuera de las ventanillas que no estás,

Te extraño y siento tú tristeza.
Irrefutable, incontrovertible:
He sabido que te quiero, que te puedo amar,
pues comparto tus pasos agrietados por la
angustia y el desánimo, y hago parte de mi esos
Senderos que transitas.

jueves, 3 de junio de 2010

Narraciones

Me gusta escribirte para saber que no me lees,

Me gusta escribirte para saber que no me entiendes,

Me gusta escribirte para comprender que no me escuchas,

Me gusta escribirte para saber que para ti es

Más importante lo oído que lo escrito,

Me gusta escribirte para confirmar

Que en ti lo oral no es impunidad

Sino diálogo.

domingo, 16 de mayo de 2010

Extrañeza

No es suficiente sentirte en mis papeles revueltos
en ocasiones tampoco es suficiente
sentirte en las líneas de viejos telegramas,
ni tampoco es suficiente nombrarte.

jueves, 1 de abril de 2010

Amores imposibles

Tremenda sorpresa me lleve ayer en la mañana, mi títere de papel se había fugado con la odiosa marioneta de Yepeto, con ese tal Pinocho que quiere ser un niño de verdad. Los vieron muy cogiditos de la mano, huyendo a toda carrera, porque una poderosa tormenta los perseguía con cientos de gototas apelmazadas. Si tan sólo hubieran esperado un momento, ella, mi títere de papel, la increíble hoja rayadita, habría cambiado su cuerpo por el vestido de tela que le confeccioné durante cuatro noches. Pero ya es un poco tarde, porque el hada de ese odioso pedazo de madera con hilos, no puede remendar el papel desleído por el agua.